El día fuera del tiempo

El día fuera del tiempo

El día 25 de julio es el Día Fuera del Tiempo!!

Es un día de perdón universal para recalibrar nuestro SER y dejar ir lo viejo con el fin de prepararse para lo nuevo.

Es un día especial para meditar y conectarse con la Luz interna.

Los mayas utilizaban un calendario llamado Tzolkin que consistía en 13 meses (o lunas) de 28 días cada uno.

El Tzolkin se basaba en los ciclos de la Luna y las Pléyades que son ciclos exactos y armoniosos, pero para completar la vuelta de la Tierra al Sol faltaba un día y a este le denominaron el Día Fuera del Tiempo, que en nuestro calendario gregoriano coincide con el 25 de Julio.

Se correlaciona con la salida de Sirio, como el inicio del nuevo año galáctico/solar.

En el día fuera del tiempo los mayas se dedicaban a celebrar todo el pueblo unido, celebrando la vida.

IN LA´ KECH – A LA´ KEN

YO SOY OTRO TÚ – TÚ ERES OTRO YO

Es un día especial para cultivar el estado del ser, de estar presente, de tomar consciencia del estado de presencia, simplemente sin necesidad de hacer nada.

No hay que buscar nada, ni de correr para alcanzar nada.

Estar presente, aquí y ahora, que en definitiva es el único tiempo que existe, ya que el tiempo no existiría si no consideráramos el pasado ni el futuro.

En el presente es el instante en que siempre te encuentras, sin importar lo que sucede a tu alrededor.

Sentir nuestro ser, estar presente en el tiempo fuera del tiempo, mucho más allá de los quehaceres cotidianos, por ello para los Mayas era el día propicio para escuchar nuestra alma y enfocar en lo que deseamos manifestar en el nuevo ciclo de las 13 Lunas.

La propuesta es simple, no hacer nada, para ser lo que realmente somos.

Deseo que este día fuera del tiempo crees las condiciones para conectar con tu alma que te llenará de felicidad y plenitud.

El 25 de julio es el día fuera del tiempo, pero, si deseo, puedo transformar todos los días del año en el día fuera del tiempo, haciendo que cada día tenga su instante sin tiempo que te ayudará a reconectar y estar más cerca del Ser eterno que realmente eres.

El instante santo es un momento en el que se recibe y se da perfecta comunicación. Esto quiere decir que es un momento en el que tu mente es receptiva, tanto para recibir como para dar. El instante santo es el reconocimiento de que todas las mentes están en perfecta comunicación. Por lo tanto, tu mente no trata de cambiar nada, sino simplemente de aceptarlo todo.

Podrías vivir en el instante santo para siempre, a partir de ahora hasta la eternidad. UCDM C15 IV 344